Política
CABA: Sonaron las sirenas para recordar a las víctimas del atentado a la AMIA y seguir exigiendo justicia
“Fue una acción violenta, cruel y despiadada, planificada, ejecutada y financiada por Hezbollah”, afirmó Jorge Macri en el discurso en la Sesión Plenaria del Congreso Judío Latinoamericano, al cumplirse 30 años del atentado a la AMIA. Y agregó: “Los violentos no tienen cabida en una Ciudad donde valoramos y defendemos la vida, la libertad y la fraternidad”.
El Congreso Judío Latinoamericano es un organismo que representa a 18 países de las comunidades judías de América Latina, y pertenece a la familia del Congreso Judío Mundial.
“La misma convicción nos lleva también a condenar en este ámbito, una vez más y de manera enfática, el ataque de Hamas al Estado de Israel. El accionar de este grupo terrorista, que aún mantiene cautivos a rehenes inocentes cuya liberación seguimos reclamando, exige la condena internacional a la que nos sumamos enérgicamente”, expresó el Jefe de Gobierno.
Estuvieron también en el Plenario el Presidente de la Nación, Javier Milei; los presidentes de Paraguay, Santiago Peña, y de Uruguay, Luis Lacalle Pou; el presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de los Estados Unidos, Benjamin Cardin; y representantes de la AMIA y la DAIA, entre otras autoridades locales e internacionales.
“Como Gobierno, pero también como parte de una sociedad que se esfuerza para construir un futuro y un país mejor, somos conscientes de los desafíos que tenemos por delante. La lucha contra el terrorismo y contra el antisemitismo no conoce fronteras y requiere de una acción firme y sostenida en materia de seguridad y cooperación internacional. Este es el compromiso inquebrantable de quien les habla y de todo el equipo de gobierno. Cuenten con nosotros porque en esta Ciudad el respeto, la tolerancia y la libertad son valores que no se negocian”, detalló Macri.
En el barrio del Once y a metros del lugar del atentado la Ciudad reabre este jueves la estación del subte Pasteur-AMIA, tras una obra de remodelación. La “Estación de la Memoria” es una invitación a no olvidar. “He dado la instrucción que este jueves a las 9:53 todos los destacamentos, ambulancias y móviles de tránsito de la Ciudad harán sonar sus sirenas en recuerdo de aquel día trágico y para reclamar una condena a los culpables”, adelantó Macri y todos aplaudieron.
“No podemos ni vamos a permitir que ningún acto de naturaleza ideológica, fundamentalista o terrorista rompa la paz social y la seguridad de los porteños. Elegimos la civilización y no la barbarie”, señaló Macri y remarcó que “los atentados a la AMIA y a la Embajada de Israel abrieron una herida muy profunda e imborrable en la vida de esta Ciudad y en la historia de nuestro país”.
“Desde hace 30 años seguimos uniéndonos cada 18 de julio para reclamar y exigir justicia, junto a los familiares de cada una de las víctimas y a todos los argentinos. El paso del tiempo se vuelve tan incomprensible como inaceptable para quienes seguimos pidiendo el castigo de los responsables”, planteó.
Expresó que la impunidad jamás puede prevalecer por sobre la verdad y la memoria: “Los esfuerzos por mantener vivo este reclamo no han sido pocos. Durante la presidencia de Mauricio Macri, en 2017, se presentó un proyecto en el Senado de juicio en ausencia. Y al cumplirse 25 años del atentado, el 18 de julio de 2019, se creó bajo su gobierno el Registro Público de Personas y Entidades vinculadas a actos de Terrorismo y su Financiamiento, incluyendo en él a Hezbollah. Así, fuimos el primer país de la región en tomar esta posición contra el brazo ejecutor de la voladura de AMIA, un crimen de lesa humanidad, tal como recientemente fue calificado por la Cámara Federal de Casación Penal”.
Y mostró su preocupación por el “alarmante” crecimiento del antisemitismo en otros países. “Sin embargo, no dejamos de comprometernos con el fortalecimiento del diálogo interreligioso en nuestra Ciudad, un modelo inspirador para todos aquellos que luchan por defender y construir la cultura del encuentro y el respeto. La convivencia pacífica entre culturas e identidades diversas es patrimonio de una sociedad madura y tolerante que, sin olvidar su pasado ni su dolor, mira hacia delante con esperanza”, concluyó.