La Policía Federal desarticuló una sanguinaria banda narco

La Policía Federal Argentina, dependiente del Ministerio de Seguridad de la Nación, desarticuló este viernes una banda narcocriminal que comercializaba sustancias prohibidas luego de realizar una serie de operativos en las localidades bonaerenses de Moreno y San Miguel. Además, el grupo era buscado por secuestrar y torturar a una persona.

Agentes de la División Homicidios comenzaron una investigación a partir de la denuncia de un hombre que se dedicaba al narcomenudeo en dicha banda. El arrepentido contó que se asoció a la pandilla liderada por una mujer conocida como “La Gringa” pero que la sociedad terminó abruptamente. Lo que ocurrió fue que el hombre, un adicto, comenzó a consumir parte de la droga que debía vender, lo cual afectó al ilícito negocio. Continuaron operando de esta manera hasta que en un determinado momento, su jefa notó la falta de 50 gramos de cocaína, a partir de lo cual, la Gringa se enfureció y comenzó a hostigar a su subordinado. La persecución y el maltrato terminó, finalmente, en el secuestro del hombre, al que encerraron en un búnker de la zona. Allí fue torturado sufriendo todo tipo de vejámenes, hasta la propia amputación de su dedo meñique mediante la utilización de una amoladora. Finalmente, luego de permanecer 3 días privado de su libertad la banda criminal lo liberó cerca del hospital Las Heras, no sin antes realizarle un tatuaje con la frase: “No robes más”.

La denuncia se realizó ante la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 4 a cargo del juez Federico Soñora, la cual ordenó a los detectives federales la investigación del caso. De esta manera se rastrearon cuatro domicilios en las localidades de San Miguel y Moreno donde podrían hallarse los delincuentes en cuestión. La Justicia dispuso los allanamientos pertinentes y, una vez efectuados, quedaron detenidos cinco hombres y una mujer, todos ellos mayores de edad. En tanto a la acusada conocida como “La Gringa” continúa prófuga y sigue siendo intensamente buscada por los efectivos federales.

Asimismo, se secuestraron más de 600 dosis de cocaína, 150 de marihuana, una pistola calibre 9 mm, otra pistola calibre 11.25 con pedido de secuestro, gran cantidad de municiones, 2 balanzas digitales, elementos punzantes, una amoladora y siete teléfonos celulares. Los detenidos junto a los elementos incautados, quedaron a disposición del magistrado interventor en la causa por “Privación Ilegítima de la Libertad- Torturas” e infracción a la ley de Drogas.